viernes, 20 de mayo de 2011

Ironcat 2011. El placer de lo sencillo.

Allá va un auténtico rollazo. Crónica de carrera pura y dura, lo siento, estos días no estoy imaginativo para contar algo más entretenido. Sólo para auténticos interesados.


Tercera participación en el IC, ya sé más o menos cómo va todo, ya tengo perfecto conocimiento de lo que hay, organización, circuitos, etc, aunque siempre afrontar este reto u otros te mantiene con cierta tensión, cierto nerviosismo, que se pone de manifiesto la noche antes cuando estás preparando todo el material y dándole una y mil vueltas, repasando mentalmente, incluso cuando ya estás metido en la cama, si lo he preparado, todo si no se me olvida nada, repasando incluso los movimientos de las transiciones aunque ya te salgan mecánicamente.

Aunque tengas cierto control de la situación siempre hay elementos externos que no puedes dominar, aquí en La Ampolla uno de ellos es el viento. Cuando vinimos el primer año, el 2009, en cuanto a meteorología salió un día perfecto, sin embargo no fui plenamente consciente de ello hasta el año pasado, el de los vendavales. Este año las previsiones habían sido un tanto confusas. A última hora se confirmaron unos pronósticos bastante buenos: nada de viento al inicio, empezaría a soplar ligeramente a lo largo de la mañana, para cobrar cierta intensidad a partir de mediodía y por la tarde.

La mañana es preciosa, el mar plano completamente y sólo una variación con respecto a años anteriores, serán tres vueltas en lugar de dos. Supongo que para la organización será más fácil tener más controlados a todos los participantes en un circuito más pequeño, con barcas mas a mano de todos en caso de problemas. A mí, en principio, me parece peor para nosotros, se supone que en menos espacio estemos más juntos con una natación más embarullada y posibles doblajes. Sin embargo excepto en la primera boya, en que se formó cierto tapón, he nadado muy cómodo, buena parte del recorrido yo solo, sin ser molestado por nadie, claro que siempre hay alguno que se te cruza o te va “empujando” poco a poco sacándote de tu trayectoria. Pero en general disfruté muchísimo nadando, (quién lo diría hace unos años), tanto que en algunos momentos he ido tan a lo mío, tan cómodo, tan relajado, que me he olvidado de que estaba “compitiendo”, y de que había que apretar un poco más jajaja. Durante un buen tramo he ido pensando que soy un privilegiado por poder practicar este deporte, por poder afrontar este reto, por estar nadando tan a gusto, por tener a mi disposición la inmensidad del mar y en esas condiciones de absoluta calma y placidez.

Al paso de cada vuelta miraba el crono, tiempos casi calcados en cada una y unos cálculos para hacer un tiempo final buenísimo, mucho mejor de lo esperado, jeje, pero no contaba con el tramo final, hasta la salida, se me hizo un poco más largo de lo que pensaba y ya enfilando hacia la rampa, entre los barcos, miraba el crono y me veía muy justo para estar en el tiempo que me había propuesto (1:15), así que me tocó apretar un poco al final lo que no había hecho en los 3.600 metros anteriores. Al final objetivo cumplido 1:15:30 y puesto 118.

Hago la transición bastante rápida. Este año a diferencia de los anteriores no me voy a cambiar de ropa, lo voy a hacer todo con el mono del Triatlón Salamanca. Sí tardo un poco más de lo normal en ponerme los calcetines, pero por lo demás muy rápido, y creo que en la transición adelanto a bastante gente.

En la bici también muy cómodo, primera vuelta de 6: 29 km/h. El resto también muy regulares, manteniendo la misma media cada vez que miraba el cuenta, aunque seguramente bajando poco a poco el “pico” de la media. Justo al empezar la tercera vuelta empieza a soplar el aire, al principio muy ligeramente, y luego, sin llegar a ser un vendaval, pero cada vez algo más fuerte, de modo que en la ida bajaba algo la media y se recuperaba en la vuelta hacia boxes. Sigo manteniendo los 29 km/h, hasta la última vuelta en que se suma todo un poco: el cansancio, las ganas de acabar, los dolores varios, el viento y ya baja la media a 28; me queda la esperanza de volverlos a ver los 29 al acabar con el aire a favor, pero no lo logro, por muy poco. Por mi cuenta 178´98 km. en 6:11:25, casi los 29, exactamente 28´9 km/h, (marcando 180 km. sí habría llegado a los 29). Los tiempos oficiales son 6:17:08 incluyendo las transiciones a 28´64 km/h. Puesto de este sector 95.

No me esperaba estar tan adelante, el tiempo no es malo, (algo peor que el primer año), pero durante el recorrido me daba al impresión de que me había adelantado mucha gente (aparte de los que me doblaban), se ve que no fueron tantos, aparte de que sin duda gané bastantes puestos en las dos transiciones. He hecho la bici en general bastante cómodo, sin forzar tanto como el primer año. Pero en el Ironcat, a diferencia de otras pruebas con cuestas y puertos, no puedes dejar de darle a los pedales, es tan absolutamente llano que no puedes parar de pedalear, no te permite ni un minuto de descanso, lo que convierte un recorrido fácil en un trabajo de martilleo constante. Casi todo el recorrido se puede hacer con el plato y acoplado, salvo un tramo en que la carretera está peor asfaltada y, yo al menos, prefiero hacerlo agarrado a las manetas, tanto por seguridad como por cambiar un poco la postura. Eso sí, en las últimas vueltas en que ya soplaba un poco el aire en ocasiones me pongo de pie para darle un poco de “vidilla” al ritmo y además darle descanso también al culo.

Al final duele casi todo, los hombros y sobre todo el cuello y el mal eterno: la planta del pie derecho, si bien con las nuevas zapatillas el problema ha tardado en manifestarse mucho más que en otras ocasiones. Por el contrario, al ser casi recién estrenadas aún no están hechas al pie, aún no se han dado de sí lo suficiente, lo que unido a que quizás sean un poquito justas en la última vuelta me empezaron a hacer un daño terrible en los dedos pequeños del pie izquierdo.

Por otra parte, le salgo muy económico a la organización. En toda la bici sólo he bebido agua, nos daban botellines en los dos avituallamientos por vuelta, pero no he bebido ni coca cola ni isotónica que también daban; yo llevaba un bidón con agua y otro con agua mezclada con acuarius y de éste me sobró algo y comida sólo he comido creo que 4 cachos de plátano (en la primera vuelta no comí y en la última creo que tampoco), una barrita y una bolsita de gominolas que llevaba yo, pero ni geles, ni glusocas ni nada más. (Eso sí, el día antes había cenado bien y también había desayunado bien por la mañana).

En las últimas vueltas de la bici apareció como había prometido Efedequis, megáfono en mano, con la familia, dando ánimos hasta las primeras a pie en que tuvieron que marcharse a otros compromisos. Gracias por los ánimos majos, menudo “puntazo” coincidir por ahí a casi 900 Km. de casa, jajaja.

Segunda transición también muy rápida y salgo corriendo como no imaginé que pudiera hacerlo, me quedé sorprendido de que pudiera trotar tan a gusto, para nada he notado las “patas de palo”. Al poco de empezar a correr noto molestias en la planta del pie derecho. Es la que me duele con tantos kilómetros de bici y la solución para mitigar el problema en la bici es echarle agua, un lujo en el Ironcat contar con agua fría en los avituallamientos. Como digo, noto “algo” en la planta, pero no paro, otras veces he tenido la sensación de tener una ampolla y luego no ha sido nada, así que continúo. En esta ocasión sí que había “algo” que descubrí al llegar a meta, la piel de la planta del pie se me había hecho un pliegue y sin llegar a formar una ampolla como tal, sí me molestaba, pero no lo suficiente como para no poder correr, en algunos momentos me obligaba a pisar un poco distinto, pero sin mayores problemas. No sé si fue por una doblez al ponerme el calcetín, si fue por estarme algo estrechas las zapas de la bici, si fue por echarme agua en los pies o si se arrugó el calcetín al ponerme las zapas de correr, o si fue por todo junto, pero tiré p´alante.

En la primera vuelta me propongo hacerla toda corriendo, sin andar ni un metro, ni siquiera en los avituallamientos. En las siguientes ya empiezo a caminar algo, en principio en los avituallamientos y luego también algunos tramos “porque sí”, sin llegar a un agotamiento extremo, pero te apetece “descansar” algo, quizás sea algo más mental que físico. En las primeras vueltas el calor es asfixiante, normal, son las horas de medio día y para más “inri” pasas hecho “un cristo” con todo el solazo pegando de plano mientras la gente está en las terrazas comiendo sus paellitas, sus marisquitos y te viene el olor, ay madre...., venga otra vuelta va, jajaja.

Los avituallamientos otra vez de lujo, bebida fría e incluso te ofrecen hielo picado que en dos o tres ocasiones meto bajo la gorra. Bebo bastante agua, coca cola y acuarius, bebo en todos los avituallamientos, pero comer otra vez muy poco, casi nada: dos o tres trozos de naranja, 4 ó 5 almendras y un trozo de sandía a lo largo de toda la carrera. Cierta sensación de empanzonamiento, pero mucho menos que los otros años y ya en las últimas vueltas, igual que los años anteriores, al pasar por el avituallamiento de boxes pido un culín de cerveza para cambiar un poco el sabor de tanta bebida dulce. Y sienta de lujo.

En las últimas vueltas afortunadamente se nubla y la temperatura se hace bastante más llevadera, además el viento ya sopla con más fuerza llegando a molestar en ocasiones. Los tiempo de cada vuelta: 40:14; 51:59; 51:40; 53:10; 49:41 y 50:44. Tiempo total de la maratón 4:57:18, quizas algo más de lo que pensaba, pero más o menos dentro de lo razonable, al menos bajé de las 5 horas, que sí era el objetivo principal. Puesto 120 en este sector.

Por cierto esto de estar “identificado” como Triatlón Salamanca procura mucho ánimos. Particularmente un grupito que no sé si no venían acompañando a un Tripi de Valladolid. Sin embargo lo más curioso es que durante la maratón me alcanza un chico de un club de Tres Cantos y me dice “¿ya no eres de los Jaramugos?” o algo así. Juer menuda sorpresa me llevé. Le digo que como los Jaramugos no estamos federados me federo con el Triatlón Salamanca y muy extrañando le pregunto de qué nos conoce. Y me dice que me conoce de verme en pruebas desde hace tiempo, que se quedó con el “toque” de los Jaramugos porque a alguien de su club le había hecho gracia el nombre. Bueno, pues ya nos saludaremos en otras, jejeje.


Ale, para acabar el rollo: tiempo oficial final 12:30:01 (puesto 117 de 147), que me deja muy pero que muy satisfecho y con ganas para afrontar en otra ocasión las ya famosas 12 horas de mi objetivo quimérico. Aunque creo que ya estoy en el límite de la posible mejora, además este año con unas condiciones casi perfectas. Nadando no puedo bajar mucho más, desde luego en bici no creo que pueda bajar de 6 horas (30 km/h en 180 Km. para mi ya es mucho correr), las transiciones poco más rápidas pueden ser y en la carrera es donde una vez más puede estar el margen de mejora (este año creo que podía haber bajado algo más), pero ya no tanto

Pero en fin, ya veremos, me gustaría probar otras carreras distancia IM, pero las opciones que se plantean “en casa” son complicadas: o están tan lejos como el IC o más, o tienen unos perfiles de bici con puertos y más puertos que no me van mucho y menos en este época del año y además el Ironcat tiene otras ventajas, aunque te pegues una paliza de viaje, no hay que andar con aviones, ni empaquetar la bici, el precio es más que ajustado con relación a lo que se cobra por ahí, no hay masificación ni te tienes que apuntar un año antes, el arroz está buenísimo y sobre todo te tratan COJONUDAMENTE (hasta los jueces son simpáticos y amables, jeje). Gracias una vez más a todos los miembros de la organización y a los voluntarios por ofrecernos una extraordinaria prueba.

9 comentarios:

El crusti dijo...

Enhorabuena. Es uno de mis objetivos. No sé el motivo de no haberme tirado aún de cabeza al tri LD.
Un abrazo y a por el siguiente reto
Santi

Michel dijo...

Tenías razón, pedazo ladrillaco, ja, ja....
No, en serio, de nuevo enhorabuena por este nuevo gran reto superado, me sigue pareciendo una pasada.
Yo nado 2 kms. en piscina y acabo hasta las pelotas, aburrido, cansado, etc... 3,8 kms. no te digo nada, si a eso le sumas 180 en bici y luego un maratón, ni te cuento...
Esto lo has superado por el pedazo entrenamiento de Medina del Campo, ja, ja...como acabamos ese día.

Un abrazo, ¿Cual es la próxima?

rafagas dijo...

Parece que incluso destila cierta rutina la crónica de este palizón.
Como escribes, eres un privilegiado por poder permitirte estos excesos y si además lo haces con la naturalidad que lo describes, pues provocas mi envidia más insana.
Mi más cordial enhorabuena por el nuevo reto superado, me descubro.

Atalanta dijo...

Enhorabuena, eres una máquina, sabes bien cómo te envidio. Hacer bien las carreras o estar en forma no es más que eso, ir a gusto o medio agusto sin darle demasiada importancia. El trabajo del año dio su fruto.

Xocas dijo...

¡Enhorabauena! De mayo quiero ser como tú, soltar una crónica así en la que, como si nada, describes todo un IM como un retillo más superado con "algo" de esfuerzo. Por cierto, que razón llevas en lo de las 12h. Sobre el papel parece asequible, pero realmente hay que estar muy en forma, ¿verdad? (Yo solo lo intuyo, pero es que me parece increíble que se bajen esos tiempos con tanta frecuencia.)

CiegoSabino dijo...

Vaya, vaya, sí que soy un tío envidiado, jajaja.

Crusti, pues ya sabes, sólo es ponerse y darle. Eso sí no empieces por LD, hombre, hay por ahí algunos olímpicos (demasiado pocos la verdad) que es una distancia muy chula.

Michel, a ti te voy yo a dar ladrillo, jeje. como le digo a Santi es ponerse, y tener bien "asimilado" en la cabeza que después de nadar no se acaba y que después de la bici tampoco. En muchas ocasiones he comentado que el poder de la cabeza es increíble: en un entrenamiento de los de diario por ejemplo de 10 Km, cunado llevas 8 estás deseando acabar, pero si te tocan 20 km. por ejemplo, te haces los 8 ó los 10 primeros sin enterarte, y lo mismo pasa con distancias mayores. En una media estás deseando acabar y llegas jodido, en una maratón me paso esos 21 km iniciales por ... "allí", aunque haya ido al mismo ritmo que en esa media en la que llegué "tocado". ¿O no te pasa también a tí?. Pues esto es lo mismo, tener perfectaemnte asumido lo que viene después.
¿La próxima?, creo que un 1/2 IM que hay en Aveiro el día 29. Estaba dudano y me apetecia una maratón de montaña en el norte de Palencia, el Valdecebollas, pero esto está aquí tan a mano y además va Atalanta y algunos salmantinos.

Hombre Rafagas, bienvenido. Te falta animarte y dar el pasito. El año pasado fuimos "almas gemelas" de volumen y "estilo de entrenamiento" y de rotura de huesos, jajaja. Serías perfectamente capaz de hacerlo. Desde luego somos absolutos privilegiados.

Atalanta, máquina no hombre, bueno si acaso una de aquellas "maquinarias" primitivas, un martillo pilón, machacón y machacón, eso sí, jajaja. A tí te voy yo a coger por banda para que entrenes un poco y ya verías si andabas.

Xocas, enhorabuena también a tí por superar tan bien el Aviaman. Lo de las 12 horas lo que digo, una quimera. Y lo de la sencillez, jajaja, escrito parece otra cosa, epro tampoco hay que ponerse muy dramático, jeje. El título, puede llevar un poco a engaño, no es que fuera sencillo, lo que pasa es que mi "espesez" y mi falta de inspiración para escribir algo original me llevó también a este título confuso, sino que se refiere más bien a la sencillez del deporte en sí disfrutando del agua y aire libres y sobre todo a la "sencillez" de la prueba en cuanto a organización, tan alejada de esos eventos multitudinarios, "multi-publicitados" y "multi-famosos", pero una pureba de 10, que da gusto vivir ese ambiente.

Gracias a todos, y ale, ya solté otro rollo.

Jose Guervós dijo...

Pues nada que haces un Ironman, y lo cuentas como si hubieras salido a buscar el pan.

Furacán dijo...

Enhorabuena! si el ladrillaco ha resultado de lo más entretenido

CiegoSabino dijo...

Jose, juer ¿tan mal lo he contado para que pareciera fácil? jajaja.

Furacán, ese sí que es el mayor piropo: lo de que el ladrillo haya sido entretenido, jeje. Enorabuena por el Aviamán por partida doble, sobre todo por la parte organizativa, que es mucho peor, sin duda.