Maula.

Hoy una palabra conocida en el ámbito del comercio textil, aunque imagio que se utilizará igualmente en cualquier otro sector comercial.

Una "maula" es una prenda, tela, etc, que no se vende en su momento y por tanto que queda en los estantes o en la trastienda "pasada de moda" y de imposible o muy difícil venta.

Aunque lo de "pasado de moda" hay que ponerlo en un contexto distinto del actual en que las modas son tan efímeras que apenas duran una temporada. El concepto de maula, al menos como yo lo he conocido, correspondía a otra época en que una camisa, por ejemplo, se podía comprar o vender durante varias temporadas porque la moda no era tan "veloz" y por tanto una maula era algo realmente "muy pasado de moda", ya con varios años en la tienda.

Claro, que los designios de la moda son inescrutables....


Por extensión se usa para cualquier otra cosa inútil e incluso para calificar a personas "inútiles", poco eficientes o diligentes.

5º Cross de la XVIII Liga de Cabrerizos.

Fin de la liga por esta temporada. Y esto crece cada vez más y a pasos agigantados.

Casi no pensaba ni escribir, pero el ver unas fotos de las “Tortugas Veloces” en la página de los Atletas Veteranos de Salamanca, organizadores de la liga me ha animado a hacerlo.

Lo cierto es que en los planes iniciales este domingo 13 de febrero yo debía estar corriendo la maratón de Sevilla, pero una lesión a principios de enero que me ha tenido renqueante y a medio gas casi hasta ahora; junto a una “desconocida” precaución y un bastante de pereza me llevaron a no forzar. Así que el plan que se fraguó sobre la marcha: el sábado merendola y copichuelas varias en Salamanca y el domingo carrera en Cabrerizos se presentaba irresistible.

Como siempre en los prolegómenos saludos con los conocidos, algunos ya fijos en estos eventos y agradable encuentro con los farinatos-jaramugos-pucelanos y con José Gervós, bloguero cacereño, (aunque medio salmantino), debutante en Cabrerizos y que promete repetir en próximas ediciones.

Le tomo prestada la foto del encuentro

La carrera, ni bien ni mal. Salgo frío, demasiado lento y engullido en un buen pelotón, y es que casi 500 corredores son muchos corredores

Una vez ya en el campo, empiezo a encontrarme mejor, el pelotón se va estirando, encuentro mi sitio y empiezo a correr a gusto.

Estas son las fotos a las que me refería al principio, la auténtica serpiente multicolor:

Tras subir el cuestoncio todo parece bonito: viento a favor y me siento bien. Pero a la vuelta todo cambia, naturalmente, el aire pega fuerte de cara y me lo como todo todito salvo unos cientos de metros en que me engancho a un par de corredores que me adelantan. Empiezo a estar harto del aire y de correr “tanto rato” y “tan rápido”, jajaja.

La última parte del recorrido, los “escarpes” es lo más divertido, por aquí tengo unos altibajos en el rendimiento y en las sensaciones: tan pronto subo fácilmente alguna de las cuestillas como me cuesta un mundo la siguiente.

Es evidente que no estoy en la mejor forma, aquí el “jaramugo-tanque”

El cuestón fuerte antes de meta me remata, tengo al sensación de que lo subiría más rápido andando, jajajaja.

Y pese a todo, como casi siempre, acabo contento, con esa buena sensación del deber cumplido, de haber dado lo que se ha podido, si es mucho mucho y si es “regular” como hoy pues “regular”.
9 Km. en 41:59 y puesto 231, justo en la mitad de los que acabaron. Por cierto, Atalanta, en la clasificación por equipos no hemos quedado mal, jejeje. Jaramugos y Jumentos: Atalanta, el gran Titi y un servidor.

¿Os dan la paliza los de Jazztel?.

Bueno, a mí sí y creo que ya he encontrado la solución:

Se llama al nº 900 809 400 y le dices que no quieres que te llamen más, además no hay ni que enfadarse siquiera, jajaja, me ha atendido una señorita muy amable y comprensiva (supongo que es un discurso que ya tienen aprendido y que estarán hasta el gorro de charlas y de broncas con lo que se limitan a hacer su trabajo y listo) y sin más preguntas que el nº de teléfono y nombre del titular de la línea te incluyen el la Lista Robinson de Jazztel para que no te vuelvan a llamar. Espero que sea efectivo, que con estas cosas de listas y protecciones de datos y tal, una vez que has dado este paso ya no pueden jugar.

Además aprovechando ya le he soltado lo que hemos comentado varias veces: que esta política que están teniendo de dar la paliza continuamente va en perjuicio suyo, porque, yo al menos y más gente con la que he hablado, en el momento en el que oigamos la palabra Jazztel ya no vamos a querer ni oír nada de lo que nos puedan ofrecer.

En fin, al menos en Ciudad Rodrigo, donde están ahora (mejor dicho llevan ya unos meses) dando la coña, corred la voz entre otros afectados.

Faltriquera.

La faltriquera es una parte de la indumentaria femenina, generalmente de los vestidos de gala, regionales, en nuestro caso, de "charra".

Se trata de un pequeño bolso de tela con una cinta para atar a la cintura, que se usaba a modo de bolsillo, como digo en esos trajes de gala en los que no suele haber otros bolsillos.

Seguramente también se usaba en ocasiones en la indumentaria de diario con todas esas sayas, refajos, etc, que se ponían no hace tantos años las mujeres, aunque supongo que en esos casos sería más habitual el uso de mandiles con bolsillos.

Y en consonancia con el uso en trajes de gala, la faltriquera también suele estar convenientemente bordada o adornada.

Por otra parte, es una prenda que estos últimos años he visto renacer entre el mundillo "jipioso", a modo de cinturón bien con un solo bolsillo o con bolsillos a ambos lados.

E incluso como elementos evolucionados de la faltiquera se podrían considerar las actuales riñoneras o los cinturones porta herramientas que usan por ejemplo los electricistas.