Es frecuente en los deportes, bien sean de equipo o individuales, de "enfrentamiento directo" con los rivales el hablar de "victorias muy trabajadas" o "muy sufridas" cuando las dificultades han sido muchas, la confrontación poco clara o muy trabada, con poco lucimiento y sin lugar para el preciosismo, recurriendo más al "oficio" que a la calidad.
Mi Triatlón de Guadalajara, celebrado el 29 de agosto fue eso, una derrota en toda regla, pero además una derrota dificultosa y trabada, sin lucimiento ninguno.
Poniéndonos en antecedentes hay que destacar que llegaba en muy buena condición, o eso me parecía, después de un mes de agosto con muchos y buenos entrenamientos, y con buenas expectativas en cuanto al resultado, lo que unido a cierta "pérdida de respeto" a una distancia 1/2 IM por la experiencia ya acumulada me hizo no tomar las precauciones debidas (en definitiva y en pocas palabras, que iba un poco "crecidito").
Por otra parte en lo climatológico el asunto se presentaba complicado. Después de un mes de agosto irregular con algunos días o semanas realmente frescos, para el fin de semana se anunciaba calor, mucho calor. Y a fé que lo hizo. El viernes llevaba un bocadillo de chorizo (sí, sí, de chorizo) para cenar, que después de estar toda la tarde en el maletero del coche parecía chorizo frito en lugar de crudo, que es como yo lo había metido en el pan, jajaja.
Pero dejémonos de prolegómenos y vamos a la crónica de la prueba.
Al "caloret".
Al "caloret".
La natación se hace en el azud de Pareja, donde nos han llevado las bicis el día antes a la T1 y el sábado por la mañana la organización nos lleva en autobús.
Un lugar muy agradable con un calor sofocante a la hora de comenzar la prueba a mediodía (he oído en un vídeo por ahí que 38 grados). Pese a todo se permite el neopreno, la temperatura del agua debe estar al límite. Me cuesta ponérmelo, me está bastante justo y sudo a chorros para enfundármelo, ni que decir tiene que una vez puesto también. Lo mejor es meterse en el agua mientras se da la salida. Para entrar y salir del agua hay una rampa de cemento pulido, que tan pronto entras en contacto con el agua resbala que da gusto, lo que a los menos precavidos los lleva directos al suelo de culo. Para salir hay que ayudarse de unas cuerdas.
Otros se divierten dejándose resbalar por la rampa. Para salir de la natación (por otro lugar distinto, pero también con una rampa similar o incluso más empinada aún) han puesto unas alfombras de goma para no resbalar y hay que agarrarse de una cuerda, además de contar con la colaboración de varios voluntarios, si no es casi imposible.
Un lugar muy agradable con un calor sofocante a la hora de comenzar la prueba a mediodía (he oído en un vídeo por ahí que 38 grados). Pese a todo se permite el neopreno, la temperatura del agua debe estar al límite. Me cuesta ponérmelo, me está bastante justo y sudo a chorros para enfundármelo, ni que decir tiene que una vez puesto también. Lo mejor es meterse en el agua mientras se da la salida. Para entrar y salir del agua hay una rampa de cemento pulido, que tan pronto entras en contacto con el agua resbala que da gusto, lo que a los menos precavidos los lleva directos al suelo de culo. Para salir hay que ayudarse de unas cuerdas.
Otros se divierten dejándose resbalar por la rampa. Para salir de la natación (por otro lugar distinto, pero también con una rampa similar o incluso más empinada aún) han puesto unas alfombras de goma para no resbalar y hay que agarrarse de una cuerda, además de contar con la colaboración de varios voluntarios, si no es casi imposible.
Se da la salida desde dentro del agua y a nadar con calma. Me adelantan algunos e inevitablemente, aunque salga en la parte casi trasera, hay algunos golpes, pero una vez avanzados unos metros más o menos se aclaran las posiciones y he nadado bastante cómodo, de hecho, algunas veces echaba de menos algo más de barullo para nadar con algo más de tensión y no simplemente dejarme llevar con un ritmo facilón. En general contento con la natación, 1.900 metros en 38:43 y puesto 210 de los 243 que acabaron. Bien, es más o menos mi sitio.
La transición bastante mala, salgo dándole a los botones del Garmin (además para nada), porque no lo puse bien en funcionamiento al principio y luego se complica con el neopreno, ya he dicho que me queda bastante justo y no consigo quitármelo con rapidez, se me atasca en codos, manos y pies.
Y llegó el desmadre.
Cojo la bici con ganas y ya desde el principio muy a gusto. Empiezo a adelantar gente, casi siempre hay alguien "a tiro", de momento en unos ligeros toboganes en los que voy rápido y cómodo. Poco después empieza un puerto en el que me sigo encontrando muy bien y sigo adelantando. Poco antes de coronar el puertecillo, por el km 18 está el primer avituallamiento. Salí de boxes con un bidón de agua, que de momento apenas he probado y cojo un bidón de isotónica (que por cierto, no me gustó mucho y además con el calor que hacía cuando a lo largo de la prueba he ido a beber pues claro, caliente, tampoco estaba muy apetecible) y una botella de agua de la que doy unos tragos y me echo otro poco por encima. Mi intención era coger también medio plátano, pero por circunstancias no pudo ser. De todos modos, voy muy confiado con el tema de comer y beber. En las salidas de todo el verano, incluso con bastante calor, apenas había necesitado beber hasta pasado mucho rato y comer muy ocasionalmente en alguna salida larga, por lo que yo sólo llevaba agua y el resto que necesitara, de los avituallamientos.
Se inicia una larga bajada, bastante más tendida que la subida, por lo que tampoco se alcanzan grandes velocidades y en la que se puede seguir pedaleando bastante rato. Sigo adelantando e incluso me permito "reñirle" a un coche que iba delante de mi grabando en vídeo a otros participantes que iban por delante y que me hizo incluso frenar en alguna ocasión.
A lo loco. |
Última subidita, Guadalajara a tiro de rápido descenso. |
Si iría ya un poco tocado que en la T2 hasta me confundí de pasillo (es la primera vez que me pasa). Estuve dudando y al final me fui por el que no era. La transición tampoco fue especialmente buena.
Y salgo a ¿"correr"?. La debacle.
Cuando empiezo a correr la temperatura sigue por encima de los 30 grados. Al poco de iniciarse la carrera está un primer avituallamiento. El día antes, con las previsiones del calor, me preguntaba que no sabía si moriría de sed o de empanzonamiento. Pues bien un poco de ambas cosas, primero de sed y luego de beber.
Y acabo de salir a correr... |
En fin, sigo con mis penurias. Me cuesta un mundo acabar esta primera vuelta (eran cuatro) deshidratado y pájara total, sin fuerzas, ganas ni ilusión y ya pensando en la retirada. Decido continuar por si por algún misterioso milagro quizás pueda encontrarme algo mejor un poco más adelante. Al paso por el avituallamiento al inicio de la segunda vuelta, paro un rato largo y, de perdidos al río, me tomo un gel por primera vez en mi vida. Ha sido como si hubiera roto una especie de promesa, jajaja. El caso es que los dos o tres kilómetros siguientes fueron peores aún que todo lo anterior, decir catastróficos es poco, jajaja. Andando, pero además sin motivación ninguna, ni siquiera es de esas veces que ya no puedes con tu alma y que impedido para corretear intentas andar un poquillo rápido hasta que te vengan las fuerzas o las ganas de echar otro trotecillo, no. Aquí no, era un estar por estar, en contraste con los ánimos que te daban algunos voluntarios que ponían todo su empeño en alentarte. No corría ni cuesta abajo. Lo cierto es que tras esos dos o tres kilómetros se pasaba por delante del recinto donde estaban los boxes y la meta. Faltó "el canto de un duro" para que fuera hacia allí en lugar de seguir la carrera. Pero una vez más decidí continuar, darme otra oportunidad, esperar a ver si se obraba el milagro, porque desde luego tal y como iba era inviable continuar. También pesaron en la decisión otras circunstancias como no defraudar a mis miles de seguidores (jajajaja); el que después de toda la tarde "en faena" para lo "poco" que quedaba (todavía 12 ó 13 km. no era tan poco) no lo podía dejar y el hecho de que una retirada implicaría tener que volver otro año a acabar lo que dejaría a medias (no descarto volver a quitarme la espinita -si es posible con menos calor, claro-, pero no sería esa especie de "obligación" en la que me pondría una retirada).
En fin tras ese momento se iniciaba una bajada en la que parece que se produjo el milagro y comencé a trotar "a buen ritmo" (nótese el uso de las comillas y entiéndase lo que "a buen ritmo" podía significar en ese momento, jeje). Sería el efecto del gel, de que ya había bajado bastante la temperatura, de que el "descanso" previo me había sentado bien, lo que fuera, pero sin ser para tirar cohetes a partir de ahí cada vez he ido un poco mejor hasta el final, incluyendo un segundo gel al inicio de la tercera vuelta. Eso sí, ni por más que bebiera, de hecho como decía antes iba ya un poco empanzonado y algo revueltillo del estómago a lo que los geles supongo que también contribuirían algo, pero la estocada de la deshidratación ya la llevaba encima, continuamente me entraban unas terribles ganas de mear, para finalmente echar tres gotas y de un color más parecido al cognac que a la cerveza, jajaja. De forma recurrente me venía a la cabeza la pájara más gorda que he tenido nunca que fue hace unos años en el Puente de la Yunta camino de Monsagro un día de junio también de muchísimo calor. Incluso notaba que se me puso la voz "aflautada" como aquél día.
Finalmente, y esta vez sí que sí, con más pena que gloria, conseguí acabar los 20 kilómetros con el asombroso tiempo de 2:36:11, lo que supuso el segundo peor tiempo de los 243 participantes que acabaron, para acabar la prueba con un tiempo total de 6:18:44 en el puesto 232 de los 243.
Dejo un vídeo centrado, naturalmente, en los primeros, pero en el que se da cuenta de las circunstancias generales del día y de la prueba.
Por cierto, y fuera ya del tema por si a alguien le interesa, el Nortwest Triman (celebrado el 28 de junio, del que no hice crónica) se desarrolló de forma un poco parecida, natación regular, bici bien y carrera mal, pero el rejonazo en la carrera a pie no fue tan fuerte, digamos que no fue un pajarón descarado, sino el natural agotamiento de fuerzas.
4 comentarios:
Con esas condiciones y en un Larga Distancia( se llamará media pero unas 6 horas de actividad sin parar...) es muy fácil petar como un campeón, como dice el Killian.
Joder, echo de menos la crónica del Northwets
Jaja, petada por todo lo alto, Y sí lo de "media distancia" es curioso, pero claro "corta" es un olímpico que son 2 horas y media.
Lo del North West se quedó ahí en su momento, luego se metieron otras cosas y finalmente ya no me apeteció. Y mira que me insistió Abel. En fin, habrá que apuntarse para el año que viene y contarlo, jeje.
Bueno, lo principal, lo acabaste, cuando no se tiene el día por la razón que sea hay que aguantar y sufrir, tampoco es deshonra abandonar, pero claro, si se hace ya queda ahí una tarea pendiente.
Salu2 y enhorabuena, que un medio ironman no es tontaría.
Gracias Juanlu, pocas he abandonado, pero sí, a esas tengo que volver, cuando sea. Aunque alguna ya no se celebra.
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