lunes, 13 de agosto de 2012

Batuecas. Mística y deporte.



El sábado anduve con Iron Manu por territorios Batuecos. En principio se trataba de completar correctamente la bajada al monasterio desde Los Puertitos, por lo que la primera parte, desde la carretera de la Peña hasta Los Puertitos la haríamos por la pista para evitar pérdidas de tiempo y arañazos en las piernas, queda para mejor ocasión buscar algún paso más agreste, eso sí sin que haya que andar "desbrozando con las piernas".

Inicio de la ruta en una curva de la carretera de la Peña.
Comienzo por la pista que rodea todo el Valle del Lera.
Por tanto esa parte de pista sin mayores problemas, y prácticamente sin desnivel hasta Los Puertitos, aunque la hicimos andando casi toda.

Desde los Puertitos, primeras vistas de la ladera sur de las Batuecas.
Desde Los Puertitos ya comienza el sendero, hay que subir un poco hacia la base del Mingorro y luego ya comienza la bajada continua y muy suave hacia el valle.

Y un poco más adelante la ladera norte, Risco del Ciervo.
Vista atrás, la Peña de Francia.
El sendero es claro y perfectamente transitable, se puede correr bien, salvo los tramos en que se atraviesan algunos canchales, como digo con poco desnivel, por lo que es perfecto para trotar suave.


La Peña del Huevo.
Cordal de la ladera norte, con la caseta de vigilancia de incendios y la Peña del Huevo
Cuando ya tienes a la vista el monasterio, la última parte de la bajada, ya es algo más brusca, aunque sigue siendo fácil, el sendero está bien y seguramente sea la parte más transitada por ser la más cercana al monasterio.
Monasterio del Desierto de San José de Batuecas. (Curioso que  un lugar tan frondoso se llame  "Desierto", pero quizás por eso precisamente desde siempre fue un lugar complicado, aislado y alejado del resto del mundo. Salvo algún cabrero, algún colmenero y algún carbonero no debía ser lugar transitado, por lo que los monjes que se retiraban al valle podían vivir en soledad como si se tratase de un verdadero desierto, aislados en las ermitas dispersas que se reparten por el monte, aparte del monasterio central).
Justamente llegas al río donde hay una poza. Buenísima para pegarse un chapuzón, naturalmente.


Allí me encontré a uno de esos ermitaños.
Unos metros junto a la tapia del convento y para arriba. Directos hacia El Portillo. Aquí empezaron las penurias. Subida, en este caso sí, bastante fuerte y sobre todo con mucho calor. Hasta entonces no había hecho  mucho calor, aunque salimos tarde, al principio tuvimos buena temperatura y después bastante sombra. En esta subida, orientada al sur, aunque también hay zonas de sombra es menos tupida y menos fresca, estuvimos más expuestos al sol y sobre todo que era mediodía, jeje.

Desde la subida al Portillo, la ladera sur por donde bajamos por la mañana.
Portillo, un descansito


El ermitaño, acostumbrado a una vida de paz y reposo se empezaba a desfondar  (eso sí, había subido mejor que yo).
y para La Alberca, Camino fácil, pista y llegando a La Alberca máquinas recién metidas para hacer un cortafuegos donde antes había un sendero o como mucho una pista.

En La Alberca avituallamiento como Dios manda

¡¡¡ Pero qué rica !!!!!
y a completar el círculo por el camino que va hasta La Peña (que coincide con el GR 10), hasta más o menos la mitad de la subida donde habíamos iniciado ruta.


Al final según los "cacharros" del Manu 27´22 km., en más o menos 6 horas (sin contar las paradas para el chapuzón en la poza y para la rehidratación en La Alberca). Hicimos la mayor parte andando ligero, salvo en la bajada hacia el monasterio que la hicimos en su mayor parte correteando suave.



Queda mucho trabajo pendiente para próximas visitas. Visto que el camino de la ladera sur del valle está perfecto falta comprobar sin son transitables algunos caminos que se ven en la ladera norte que se dirigen hacia la zona de la Peña del Huevo para completar el círculo del Valle de las Batuecas sin tener que bajar a La Alberca o sin tener que rodearlo por fuera, por las pistas del Valle del Lera. Yo lo intenté hace un par de años por la cuerda de esa ladera norte y en su mayor parte sí se puede transitar, en algunas zonas por sendero y en otras monte a través aunque no haya camino como tal, pero había otras zonas muy complicadas de monte bajo o pinares cerrados de maleza que me empeñé en atravesar pero que no son nada recomendables, porque aunque al final puedas pasar se pierde mucho tiempo. Y como decía al principio si se quiere conectar las Batuecas con la Peña a través del Paso de los Lobos, sin bajar a la pista también hay caminos que desde lejos se ven bien, pero que al final en muchas zonas se acaban cerrando, quizás se pueda cruzar por arriba, subiendo y bajando la Mesa del Francés.

Lo peor de la jornada no fue el calor ni el cansancio, lo peor fue un incendio que comenzamos a ver desde el  Portillo y que pensábamos que estaba cerca, por la zona de Cepeda o Miranda del Castañar, ya en casa me enteré de que había sido algo más lejos, en la zona de Béjar.



Para acabar un poco de mística. El Santuario de las Batuecas está ocupado por Carmelitas Descalzos, sin duda un lugar perfecto para "sentir"  el Cántico Espiritual de San Juan de la Cruz.


Así a la puerta del monasterio hay un par de citas del Cántico Espiritual.




Os dejo con algunos fragmentos musicados magníficamente por el gran Amancio Prada.




3 comentarios:

CiegoSabino dijo...

Ah, que se me olvidaba. Un ruta que se le ocurrió al Iron y que sí es factible: Monsagro-Puertitos-Batuecas.

Xocas dijo...

Sois incansables, claro que desveláis vuestros secretos: esos avituallamientos líquidos y sólidos son una garantía de éxito :D

Xocas dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.